La impermeabilización de una vivienda es fundamental, ya sea para anticiparse a los problemas que genera no hacerlo, para reparar humedades y filtraciones, o por mantenimiento periódico.
Aunque existe cada vez mayor conciencia de su importancia, por ejemplo en las comunidades de vecinos, parece oportuno destacar diez razones para impermeabilizar una vivienda que siempre habrá que tener en cuenta.
- Evitar la presencia de moho, que trae consigo problemas sanitarios. Es conocido que el moho y los hongos son perjudiciales para el aparato respiratorio humano. En el caso de personas mayores o enfermas, así como personas que padezcan alergias, las consecuencias pueden resultar aún más graves.
. - Proteger los cimientos del edificio. Una impermeabilización deficiente facilitará las filtraciones de la humedad a las estructuras básicas del edificio, con el consiguiente riesgo por el deterioro.
. - Evitar daños en los materiales internos de la vivienda. Placas de yeso abombadas, dinteles de puertas estropeados, desunión de baldosas, maderas que se pudren… todo ello es consecuencia directa de la presencia de agua y humedades.
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- Mantener el valor de la vivienda. Una casa impermeabilizada conserva mucho mejor su valor en el mercado inmobiliario.
. - Impedir la presencia de olores desagradables. En ocasiones, aunque la humedad o el moho solo aparezcan en una pequeña parte de la casa, el olor se trasmite a todo el domicilio.
. - Aislante eléctrico. Es imprescindible proteger las instalaciones eléctricas de filtraciones y humedades, que las deterioran. El agua incluso podría provocar cortocircuitos, con el consiguiente riesgo para la salud.
. - Evitar reparaciones costosas. Una buena impermeabilización a tiempo resulta económicamente mucho más rentable que una gran reparación cuando no queda más remedio. Tarde o temprano la lluvia y otros fenómenos climatológicos terminan por afectar a las casas. Si el problema no se ataja a tiempo, o se ponen ‘parches’, la solución final será mucho más costosa.
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. - Aislante térmico. Si la casa es capaz de protegerse del agua gracias a la impermeabilización, también lo hará del frío. Por lo tanto, en invierno la vivienda resultará más cálida, con el consiguiente ahorro económico en la factura de la calefacción.
. - Permite acondicionar un sótano de tal forma que, no solo la vivienda gane un espacio habitable, sino que además éste actúe como barrera para la humedad y el calor entre el suelo y las habitaciones superiores.
. - Detiene el deterioro estético. Tanto la fachada como los muros y las paredes a la vista ofrecen una mala imagen cuando sufren el efecto de la humedad, ya que materiales como el yeso y la pintura se estropean.