Componentes de los automóviles, muebles, repuestos para motores, suelas de calzado, pinturas, aislantes, embalajes… el poliuretano (PU) es uno de los materiales más polivalentes y, al mismo tiempo, uno de los que más presente está en el día a día de las sociedades occidentales.
Sus aplicaciones son, casi, innumerables. A pesar de ello, este polímero arrastra varios mitos y sigue siendo, en su esencia, desconocido para muchos de sus usuarios habituales.
La primera gran aclaración sobre el PU es que puede ser de dos tipos; poliuretano termoestable o poliuretano termoplástico (TPU). El primero, que se degrada antes de fluir se usa, sobre todo, en espumas y aislantes. El TPU, que primero fluye y, después, se degrada, no necesita vulcanización para su proceso y es posible conformarlo con inyección, extrusión y soplado, como el resto de los termoplásticos habituales.
A continuación presentamos cinco curiosidades que quizá desconozcas sobre el mundo del poliuretano
En este momento puedes llevar PU puesto en tu propia ropa
El PU está muy presente en la confección de prendas textiles, en especial la deportiva. Este material puede adquirir la forma de una fibra elástica textil que ofrece una enorme resistencia. Impermeables, camisetas, cierto tipo de calzado especial, como el que se utiliza para la escalada y el ‘trekking’, se aprovechan de sus ventajas.
También lo hacen los bañadores de neopreno, que además de ofrecer escasa resistencia al agua y de ser muy ligeros aíslan del frío y conservan muy bien el calor del cuerpo. En la parte estética, es un material que, aplicado a la ropa, estiliza la figura.
El PU ha revolucionado el mundo de las prótesis ortopédicas
El PU lleva años demostrando su eficacia en aplicaciones médicas y reduciendo los costes en este tipo de tecnología, estando presente en válvulas de corazón, apósitos para heridas, paños quirúrgicos o útiles de cirugía.
Pero quizá es el mundo de las prótesis ortopédicas el que más se ha beneficiado en los últimos años de las ventajas de este polímero. El PU presenta una mayor aceptación que otros materiales por parte del cuerpo humano y una alta durabilidad en el diseño de prótesis ortopédicas.
La resistencia de la espuma de PU explica su amplia difusión como aislamiento
En contra de lo que en ocasiones se puede llegar a escuchar, el PU es resistente al envejecimiento aunque esté a la intemperie. Soporta el efecto del ataque de agentes químicos, no se degrada por la humedad ni por los gases de escape y tampoco se ve afectado por los disolventes de pinturas, pastas bituminosas y masillas sellantes, entre otros. Se muestra, además, estable ante carburantes, ácidos y aceites minerales.
El uso de PU ayuda a combatir los efectos del cambio climático
La capacidad aislante del poliuretano termoestable facilita un importante ahorro de la energía que las viviendas dedican a mantenerse calientes con sus sistemas de calefacción.
La eficiencia energética es mayor y las emisiones que se generan se reducen considerablemente. En la industria automovilística, el PU aventaja a otros materiales por su ligereza, lo que reduce las emisiones de gases contaminantes y el peso de los vehículos y, por lo tanto su consumo.
¿Cuánto es la duración media del poliuretano?
En el caso de aislantes para la construcción, uno de sus usos más comunes, la durabilidad de este material se estima en superior a los 50 años. En el caso de su empleo como aislante para neveras y congeladores, se considera que puede mantenerse en perfectas condiciones por un tiempo de al menos 25 años, y si hablamos de parachoques de coches, la cifra se mantiene por encima de las dos décadas.
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