El polietileno (PE), en concreto el polietileno de alta densidad (PEAD) se emplea para construcción de tanques y recipientes de líquidos de dimensiones grandes.
Son más ligeros, fuertes y menos costosos que otros materiales que se usaban antiguamente, en especial el acero inoxidable, que tiene una escasa ductilidad. Esta alternativa ha ganado difusión en el mercado gracias a sus propiedades, muy apreciadas por la industria.
La fabricación de este tipo de tanques se realiza con protección para el efecto de los rayos ultravioleta (UV), ya que la mayoría suelen permanecer a cielo abierto, y por lo tanto, expuestos a las condiciones climatológicas.
Bajo el término ‘tanques’ solemos englobar otro tipo de recipientes con especificaciones técnicas y de uso. Así, distinguimos entre:
- Tanques de almacenamiento
- Tolvas de fondo cónico (con las que se dosifica el vertido del líquido)
- Cisternas
- Tanques nodriza horizontales (que se emplean para circular remolcados por otro vehículo).
Las principales ventajas del PEAD para su uso en tanques de agua son:
PROTEGE Y EJERCE DE BARRERA
Impiden que el agua vea alteradas sus características físicas y químicas. El líquido no adquiere olores ni sabores.
VERSATILIDAD
Las características del PE para el almacenamiento de líquidos lo hacen apropiado para almacenar, además de agua, otros líquidos. Puede contener dentro del depósito productos con una densidad de hasta 1.9 kg./dm3, algo muy apreciado en la industria.
LIGEREZA
Con un menor peso que otros materiales ofrece un rendimiento superior. Esto repercute en que su transporte es menos costos0 y en que la instalación se realiza en mucho menos tiempo. Si es necesario trasladarlo de un lugar a otro, su ligereza también lo facilita.
PIEZA COMPACTA
Al ser fabricado de una sola vez, el PEAD hace imposible que haya pérdidas de agua o filtraciones. Evita, además, que se produzcan roturas y fisuras que podrían resultar peligrosas.
SIN CONTAMINACIÓN
El polietileno es un material que ofrece una gran resistencia a la corrosión y a la propagación de bacterias que podrían generar infecciones y daños en el propio depósito. Incluso en condiciones ambientales extremas, es un termoplástico que tiene una magnífica resistencia a la corrosión.
DIVERSIDAD DE FORMATOS
Los tanques de polietileno se pueden fabricar con formas muy diversas, desde las más sencillas, como las cónicas, hasta las octogonales. Su base también puede ser plana o, como en caso de las tolvas, con forma de cono.
“El polietileno no requiere de ningún mantenimiento”.
Los tanques de polietileno suelen fabricarse en tres modalidades distintas, en función de la necesidad de cada caso.
- Para agua y productos no corrosivos con densidad hasta 1.2 g/cm³ se emplean los denominados ‘básicos’. Los tanques ‘reforzados’ se reservan para
- productos corrosivos y/o con densidad hasta 1.5 g/cm³.
- Los tanques de ‘doble reforzado’, para productos muy corrosivos y/o con densidad hasta 1.8 g/cm³.
Para el traslado de agua en tanques nodrizas horizontales, éstos se equipan con un sistema rompeolas. Además, en muchas ocasiones si su base no es rectangular, la sujeción se realiza con las llamadas cunas metálicas, con las que es perfectamente compatible.
En caso de necesitar alguna reparación se puede efectuar de manera sencilla con una extrusora.