La humedad es un gran enemigo de cualquier tipo de construcción, más aún si ésta se encuentra al nivel del suelo y, por lo tanto, es susceptible de mojarse cuando llueve, hiela o nieva. El agua puede generar moho, deteriorar los cimientos, estropear tuberías y otras conducciones y convertir el espacio destinado a la vivienda o al trabajo en un lugar insalubre.
Por todo ello, es importante saber cómo hacer un poco de absorción, algo muy útil para impedir, también, que el agua que cae procedente de canalones y otros sistemas de evacuación termine en la puerta de casa.
En el procedimiento que vamos a describir juega un papel fundamental el polietileno (PE), con sus enormes ventajas como aislante además de su resistencia, su escaso peso y la larga vida útil que ofrece. Antes de comenzar la excavación, es importante tener en cuenta que debemos colocar el pozo en el lugar al que envían el agua los canalones.
Al menos tendrá que contar con una profundidad de un metro, y medir 50×50 centímetros (cm). Debe haber al menos 70 cm de distancia a la construcción.
Proceso de Instalación de un Pozo de Absorción
1 – Delimitaremos, antes de excavar, las medidas que tendrán tanto el pozo como la pendiente con estacas y una lienza. La pendiente tendrá, en total, 50 cm de largo. .
2 – Comenzamos la excavación asegurándonos de que por la zona no pasa ninguna cañería de riego. Excavamos, empleando una picota y una pala, hasta alcanzar el metro de profundidad, dejando la tierra depositada a un lado. En el caso de hallar una piedra de gran tamaño, lo más indicado para retirarla es extraer la tierra que tiene alrededor y sacarla poco a poco, con un movimiento de palanca.
3 – En el lateral del pozo más cercano a la casa realizaremos la pendiente. Para hacer que el agua se deslice hacia el pozo que estamos construyendo, se efectúa una pendiente que vaya de 0 a 20 cm. .
4 – Colocamos el PE. Situamos a una distancia un total de 1,50 metros de este termoplástico cubriendo la pendiente y el lateral del pozo más próximo a la casa. El fondo del pozo no se tapa. El PE ejercerá de barrera impermeable contra la humedad. .
5 – Con una pala, colocamos de 1 a 2 cm de arena en el fondo del pozo. .
6 – Hasta una altura de medio metro, colocamos bolones encima de la arena.
7 – Añadimos grava o cantos rodados hasta cubrir otros 25 cm. o, en su defecto, el final de la pendiente. .
8 – Echamos gravilla encima de la grava hasta completar el rellenado del todo el pozo, incluida la rampa de la pendiente. .
9 – En la parte final del añadido con gravilla, colocamos en los bordes (en todos menos en el más cercano a la vivienda) ladrillos, de forma que éstos queden situados ‘de canto’. Una vez colocados en los tres bordes, se asientan presionándolos un poco en la propia gravilla. Los ladrillos pueden ser sustituidos por otros motivos ornamentales, como conchas u otros. .
10 – En función del gusto particular, puede decorarse la parte a la vista del pozo con algún motivo, como piedras decorativas de diferentes colores que casen bien con el color de las superficies cercanas.
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