El rotomoldeo, al que se conoce también como rotocasting, o moldeo rotacional, es un procedimiento por el que se fabrican productos plásticos huecos, en especial aquellos que son de gran tamaño.
La amplia diversidad de materiales, maquinaria y moldes que emplea la industria ha hecho que se hayan producido importantes avances técnicos y que podamos decir que, en este momento, el rotomoldeo vive en un importante momento de auge. Con el rotomoldeo puede producirse un gran número de artículos huecos que pueden ser total o parcialmente cerrados, con paredes sencillas o múltiples.
Aunque la técnica es conocida desde los años 20 del siglo XX, fue en los años 60 cuando comenzó un importante desarrollo que tiene su cumbre en el momento actual. Las piezas de vinilo fueron las primeras en verse sustituidas por las fabricadas por rotomoldeo con polietileno de baja y alta densidad diseñado para esta técnica.
Otra pequeña revolución se produjo cuando la industria se dio cuenta de que podía producir tanques de gran tamaño con polietileno entrecruzado y polietileno de grados modificados. Otros avances fueron el uso de polietileno lineal de baja densidad y las resinas como el nylon, el polipropileno o el policarbonato para rotomoldeo, llamadas todas ellas ‘no-polietilénicas’.
A continuación vamos a diferenciar las siete grandes aplicaciones actuales del proceso de rotomoldeo.
1. Industria automotriz
La versatilidad de la técnica de rotomoldeo ha encontrado a un gran aliado en la industria de los automóviles, que incorpora cada vez un mayor número de plásticos por sus prestaciones y su bajo peso en comparación con otros materiales. El rotomoldeo se aplica a la fabricación de componentes de tableros de instrumentos, apoyabrazos y recubrimientos, conducciones y tanques de combustible. También las señales de tráfico y las barreras de separación se aprovechan de sus ventajas.
2. Ocio.
La industria de los juguetes es hoy en día inconcebible sin la técnica del rotomoldeo. Innumerables tipos de juguetes como muñecas, coches a escala, pelotas y balones, cocinitas y aparatos desmontables se fabrican de este modo. No solo eso, sino que con rotomoldeo se construyen otras herramientas de ocio, como esquís acuáticos, tablas de surf o la gran mayoría de los muebles de jardín.
3. Grandes depósitos y tanques.
Tanques y depósitos destinados al almacenaje de combustible, aceite o productos químicos, así como tanques sépticos y de tratamiento de aguas. También, depósitos de gran tamaño para el transporte y otros con usos en agricultura.
4. Contenedores.
Adaptables a cada necesidad específica y sometidos a los efectos de la intemperie, cada vez más contenedores se fabrican con la técnica del rotomoldeo. Es el caso de contenedores de avión, cajas refrigeradas, barriles, jardineras y otros contenedores reusables para el transporte.
5. Accesorios de almacenaje y transporte de materiales.
Esto incluye maletines médicos, botes de basura, embalaje, pallets industriales y otros contenedores especiales, etc…
6. Industria naval.
Desde barcos y todo tipo de embarcaciones de ocio hasta kayaks y canoas, el rotomoldeo ha demostrado ser una técnica muy útil, sin olvidar otros usos relacionados con las actividades en el agua, como chalecos salvavidas, flotadores de muelles o cubiertas de piscinas.
7. Otros.
La variedad de aplicaciones y usos de esta técnica es tan amplia, que conviene mencionar algunos usos menos conocidos, como en la construcción de maniquíes de moda, carcasas, tapas de alcantarillas o diferentes formatos de vallas de publicidad.
Si has leído con atención este artículo (que estamos seguros que sí), te interesará:
- Cinco curiosidades que desconocías sobre el poliuretano
- Por qué la poliolefina retráctil forma parte de nuestra vida diaria
- ¿Qué significan y por qué están por todas partes las siglas PET?
Si te ha interesado este post, bájate la guía a continuación:
[hs_action id=»10297, 16045″]