Salvar obstáculos y trabajar desde la superficie cuando instalamos e inspeccionamos conducciones es un sueño hecho realidad gracias a las tecnologías sin zanja para tuberías plásticas, denominadas ‘NO-DIG’ o TT (Trenchless Technologies) en inglés. Los servicios de electricidad, telefonía, gas, distribución de agua potable, saneamiento o televisión por cable son algunos de los más favorecidos por este tipo de técnicas. Un buen ejemplo de su uso son las conducciones de agua y alcantarillado, que necesitan un mantenimiento periódico posible sin medios intrusivos.
Este tipo de tecnologías han experimentado un enorme crecimiento en la ingeniería civil. Acorta el tiempo de trabajo cuando se trata de canalizaciones a las que costaría esfuerzo y dinero acceder y además cuenta con una enorme precisión. Entendemos como tecnología sin zanjas para tuberías plásticas al conjunto de técnicas que permiten instalar, inspeccionar y rehabilitar una canalización subterránea sin interrumpir, o con interrupción mínima, en la superficie. Si se trata de una instalación de tubos, estos no suelen tener un diámetro mayor de 3 metros.
Una de las grandes ventajas de esta técnica es que requiere de menos operarios para realizarla. Además, debido al ahorro de tiempo, el coste es significativamente más bajo que el que tienen las excavaciones tradicionales, algo que también repercute al cliente para el que se realiza el trabajo. Al involucrar menos recursos, es posible ahorrar en necesidades logísticas como el traslado de material en camiones, algo implica menor gasto de combustible y un mayor respeto por el medio ambiente. También se evitan grandes atascos en zonas de tránsito de coches. La limpieza, después de acometer el trabajo, es también mucho más sencilla.
Diferenciamos las principales técnicas de tecnología sin zanja para tuberías plásticas:
– Perforación dirigida. Se realiza con tuberías de polietileno (PE) hasta 1200 mm de diámetro, en ocasiones más. Permite realizar cruces a distintas profundidades.
– Entubado simple. Con tubos de PE o polipropileno (PP) para aplicaciones con y sin presión.
– Entubado ajustado. Con tubos de PE para aplicaciones con y sin presión.
– Entubado ajustado reducido en fábrica. Con tubos de PE o policloruro de vinilo (PVC) para aplicaciones con y sin presión.
– Entubado con tubos discretos. Con tubos de PE, PP o PVC para aplicaciones sin presión.
– Torpedo rompedor (bursting). Con tubos de PE
Este tipo de técnicas requieren que se tenga en cuenta cuáles son las características del suelo sobre el que se van a realizar, y las cargas que se aplicarán a la superficie. Si el nivel freático está a poca profundidad, el suelo es arenoso, o éste soporta cargas pesadas, la profundidad de la excavación tiene que ser tal que la presión de la carga en la superficie no afecte a la perforación. Si esto sucediera se daría un riesgo de hundimiento de la superficie.
Hay dos normativas que destacan en este tipo de tecnología sin zanjas, aunque es un tema más amplio:
– UNE-EN ISO 11295:2011. Clasificación e información sobre el diseño de sistemas de canalización en materiales plásticos utilizados en la renovación.
– UNE-EN 15885:2011. Clasificación y características prestacionales de las técnicas de renovación y reparación de desagües y alcantarillados.
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