La cuña de cerámica ha sido diseñada y fabricada con alta tecnología para que con una sola cuña se pueda soldar tanto Polietileno como PVC. Algo impensable con las cuñas clásicas de las máquinas estándar, donde la cuña de cobre se utiliza para el polietileno y la cuña de acero para el PVC.
Algunas de las ventajas de este tipo de cuñas:
Tiene una alta conductividad térmica, hasta 1.400 ºC.
El material presenta una alta dureza,
Tiene una muy buena resistencia al a temperatura
Cuenta con muy buenas propiedades de deslizamiento.
La cuña de cerámica no solamente ofrece una mejor absorción y radiación que las cuñas de metal, sino que además es antiadherente “auto-limpiable”, no tiene desgaste y es anticorrosiva.
Mientras que las cuñas clásicas tienen las resistencias insertadas lateralmente, la cuña de cerámica presenta un nuevo principio innovador, donde el elemento calefactor se introduce por la parte trasera, una resistencia que llena toda la superficie de la cuña. Esto ofrece dos grandes ventajas: la cuña se caliente mejor y temperatura es totalmente uniforme en toda ella
El método de comprobación de la temperatura es mucho más fiable, ya que, en este caso, la sonda no está entre las resistencias como en las otras cuñas.
Conocimientos prácticos.
La inspección técnica experimental, así como un estudio realizado por la MPA, laboratorio de ensayos de Hannover, han demostrado que se pueden soldar además de todas las geomembranas lisas habituales, láminas estructuradas también, de acuerdo con todas las directrices de las normas DVS. Por lo tanto esta radiación uniforme y continua a través de esta cuña da “resultados seguros incluso para las láminas con estructuras “ No se puede omitir tampoco el perfecto acabado de la soldadura, nada raro teniendo en cuenta la potencia calorífica de 2100W que tiene, a diferencia de los 1600W sumando las cuatro resistencias de las cuñas estándar.
